sábado, 9 de julio de 2016

Mi excepción



Hace tiempo que quiero explicarte unas cuantas cosas sobre mí.
Me han enseñado a no quererme demasiado porque nunca llego a estar siempre al nivel de exigencia que me piden.

Me han dicho que lo que hago no es suficiente, que nunca es suficiente, que tengo que esforzarme más.

Me han enseñado a esperar poco porque nunca recibiré, y la vida, con sus experiencias, se ha encargado de mostrarme que así es.

Me acostumbraron a que un día me querían y al siguiente ya no, aún teniéndome cerca, no te quieras imaginar cómo era cuando estaban lejos.

Me han enseñado a ser insegura. Me han hecho pensar que si no estoy, ya no existen sentimientos. No es tu culpa, ya lo sé, pero estoy marcada. Así que lo siento si a veces me muestro así, inestable y hecha un mar de dudas.
Me han enseñado que, aunque yo quiera siempre de la misma forma sin altibajos, a mi no se me quiere igual.
Me han querido mucho, pero no bien.

Por eso entiende que me cueste aceptar las excepciones a estas reglas. Que no termine de aceptar que me quieres cerca y también lejos, que no me salten las dudas. Espero que seas paciente y que veas que trato de amoldarme y aprender a aceptar que tu eres todas las excepciones de las cosas que me han enseñado durante toda mi vida.

Y créeme cuando te digo que lo intento, pero que me cuesta entender cómo alguien como podría querer estar con alguien como yo...

sábado, 2 de julio de 2016

Fuera de lugar


Y ahí estaba ella, tumbada en la cama pensando en tan solo una cosa, aun con millones de pensamientos revoloteando en su mente, ella solo pensaba: ''por que a mi?''.

Ya estaba cansada, cansada de levantarse para luego acabar en el suelo, aun adorando el tumbarse a observar las estrellas, quizá por eso la vida la tumbaba tantas veces.

Ella decía que esta vida no era para ella, que no la correspondía. Por eso se sentía fuera de lugar, alejada de la realidad, de las personas.

Solo encajaba con sus propios monstruos, aunque a veces estos también la traicionaban.